Después de haber sido una fulgurante moda, la realidad virtual (RV) empieza a ser vista como una nueva modalidad comunicacional que se suma a la panoplia de nuevos medios que trastocan y recomponen los marcos conceptuales sobre lo que es información y el acto de comunicar. El lenguaje hablado sigue siendo fundamental para explorar y conocer el mundo, pero no podemos negar que los medios electrónicos, incluyendo a las tecnologías emergentes como la RV, pueden explorar y poner en marcha nuevas vías de comunicación.
Ahora surgen los estudios que abordan esas tecnologías con profundidad y lejos de la moda comercial. La RV ya no es la piedra filosofal de las nuevas tecnologías, análisis como los de esta autora contribuyen a ubicar en su justa dimensión los alcances de dicha tecnología.
Ryan parte de que la RV es ante todo una experiencia inmersiva y multisensorial, se apoya en ello y retoma los aspectos de inmersión y realidad virtual para estudiarlos a lo largo de la historia de la literatura y el arte.
La autora ilustra cómo hasta antes del Renacimiento la gente usaba el término virtualidad para determinar las posibilidades de un objeto o de un elemento, por lo cual no había inconveniente alguno para pensar que un árbol era la virtualización de una silla, que potencialmente era un medio para sentarse. Conforme el racionalismo se fue afianzando el concepto virtual se desplazó hasta el grado de reducirse a algo negativo, al simulacro. A pesar de eso, a lo largo de la práctica estética y literaria han convivido estas dos posiciones.
La autora indaga y explora diversas obras y escritores que crean contextos inmersivos que conducen al yo del usuario a adentrarse en realidades diferentes; sostiene que gracias a la ficción esos literatos gestaron mundos virtuales. También explora las propuestas de los nuevos géneros, hipertexto, poesía electrónica, películas interactivas, instalaciones digitales, obras teatrales interactivas, etcétera.
Lo interesante de la obra está en indicar que al abordar este problema lo importante está en entender que la teoría literaria moderna se debate entre una idea de lectura pasiva y otra donde se puede franquear lo plasmado y representado en el texto, caminar hacia una lectura dinámica y de la mano del deconstruccionismo, donde los lectores participan activamente con sus fantasías e imaginación en la creación del texto.
Marie-Laure Ryan, La narración como realidad virtual, Paidós, Barcelona, 2004, pp. 456.
Publicado en etcétera, noviembre 2004.
Ryan parte de que la RV es ante todo una experiencia inmersiva y multisensorial, se apoya en ello y retoma los aspectos de inmersión y realidad virtual para estudiarlos a lo largo de la historia de la literatura y el arte.
La autora ilustra cómo hasta antes del Renacimiento la gente usaba el término virtualidad para determinar las posibilidades de un objeto o de un elemento, por lo cual no había inconveniente alguno para pensar que un árbol era la virtualización de una silla, que potencialmente era un medio para sentarse. Conforme el racionalismo se fue afianzando el concepto virtual se desplazó hasta el grado de reducirse a algo negativo, al simulacro. A pesar de eso, a lo largo de la práctica estética y literaria han convivido estas dos posiciones.
La autora indaga y explora diversas obras y escritores que crean contextos inmersivos que conducen al yo del usuario a adentrarse en realidades diferentes; sostiene que gracias a la ficción esos literatos gestaron mundos virtuales. También explora las propuestas de los nuevos géneros, hipertexto, poesía electrónica, películas interactivas, instalaciones digitales, obras teatrales interactivas, etcétera.
Lo interesante de la obra está en indicar que al abordar este problema lo importante está en entender que la teoría literaria moderna se debate entre una idea de lectura pasiva y otra donde se puede franquear lo plasmado y representado en el texto, caminar hacia una lectura dinámica y de la mano del deconstruccionismo, donde los lectores participan activamente con sus fantasías e imaginación en la creación del texto.
Marie-Laure Ryan, La narración como realidad virtual, Paidós, Barcelona, 2004, pp. 456.
Publicado en etcétera, noviembre 2004.
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