El fin de Alternativa

lunes, 14 de abril de 2008

A fines del año pasado dijimos en este espacio que el registro de Comités de Acción Política (CAPs) del partido Alternativa Socialdemócrata a través de su sitio de internet preludiaba una pesadilla. Pero el desastre que vive Alternativa no inició en realidad por internet sino por sus estatutos que al momento de ponerse en práctica dieron muestras de su flaqueza, denotaron que el sueño sueco plasmado en los mismos y engendrado en los CAPs y en una Comisión Nacional Autónoma para la Elección de Órganos de Dirección fueron producto de una alucinación posadolescente. La debilidad de tales ordenamientos no estuvo en sus transitorios, sino en la cultura política dominante en este país.
La idea de que unos estatutos de “primer mundo” eran la mejor vía para refundar el partido fue una quimera porque no dieron el ancho para generar un verdadero espacio democrático, al contrario fueron la ruta más corta para replicar la cultura priísta. En vez de abrir camino a la nueva política los CAPs multiplicaron la sabiduría política de siempre: acarreo y clientelismo al por mayor.
Los estatutos evitaron que la dirigencia nacional proviniera de una elección abierta o una asamblea nacional porque se pensó que ambas vías se prestaban al clientelismo y/o mayoriteos. Se optó por una estructura contradictoria y bicéfala. Por un lado se canceló la celebración de comicios abiertos pero en los hechos los CAPs estuvieron abiertos a cualquier ciudadano, clientela o individuo de dudosa reputación política. Pero al mismo tiempo se optó por un esquema de delegados, en donde una gran mayoría procedían de procesos de registro poco pulcros o asambleas marcadas por la trampa.
Sin embargo, en la reelección de Alberto Begné el pasado 30 de marzo ese proceso de refundación de Alternativa demostró ser pura ilusión, dicho acto fue el colofón del rosario de irregularidades que acompañaron a todo el proceso. Con la reelección de Begné se puso punto final al sueño socialdemócrata iniciado desde Democracia Social y continuado con México Posible, se demostró que ningún estatuto puede frenar por acto voluntarista o mágico la trampa y la corrupción. Transas matan estatutos. No es suficiente con las buenas intenciones y la pura arquitectura procedimental para cambiar prácticas políticas anticiudadanas que anidan en un país con una democracia de baja intensidad.
Es bueno recordar que si ayer a Alberto Begné se le iba la lengua apelando a la construcción de una sociedad de derechos y abogaba por la norma para dirimir las diferencias, terminó por mostrar el cobre al acudir a porros y métodos propios de pandilleros para reelegirse como presidente de la actual entelequia denominada partido Socialdemócrata. Negándose con su práctica, Begné no tuvo límites y por eso no se ruborizó en pedir el apoyo de los solícitos campesinos de Ignacio Iris (que curiosamente el mismo Begné había combatido y ayudado a expulsar de ese partido) para regresarlos nuevamente a Alternativa y que lo respaldaran a él y sus secuaces para correr a garrotazos a quien hizo posible que ese partido alcanzara su registro: Patricia Mercado.
Por supuesto, a la hora de argumentar los hechos siempre se tiene un arsenal de justificaciones aderezadas con una buena dosis de cinismo para explicar las prácticas gansteriles, e incluso no faltan las opiniones de Begné y sus secuaces en donde dejan en claro que los vicios ayer denunciados son sus virtudes actuales.
Publicado en el periódico Milenio, 12 de abril, 08

Las variaciones del chat

Este año el chat alcanza los veinte años de existencia. Para algunos fue en la primavera de 1988 que surgió, para otros en el verano de ese mismo año, aunque más allá de las precisiones de su nacimiento, lo cierto es que dichos espacios digitales se han tornado en uno de los servicios más usados de la red y son la expresión genuina de la cibercultura.
Desde el punto de vista técnico lo más destacado de los chats estuvo en la posibilidad de que los usuarios del mismo pudieran dialogar o “conversar” en tiempo real, de adoptar el concepto de canales de radioanimación, la aportación más interesante de la comunidad de radioaficionados, al permitir que los usuarios entraran en diferentes diálogos. A partir de 1989 los chats empezaron a propagarse por el planeta, fue el momento en que su creador, Jarkko Okarinen, convenció a diversos amigos de su natal Finlandia para instalarlo en algunas máquinas de la incipiente red finlandesa y poco después su programa fue a parar a otros servidores de otras naciones, con lo que empezó su acelerado perfeccionamiento y siete años después ya alcanzaba a segmentos importantes de todo el planeta, tornándose en un medio sin el cual la red sería imposible de entenderse.
Desde el punto de vista antropológico la red abrió la puerta a una dimensión humana en donde diversos grupos étnicos y etarios encontraron un nuevo sentido a su existencia. Los chats desde sus inicios y, sobre todo, con su uso masivo se volvieron en una perpetua fábrica de ilusiones, en donde los usuarios al perder su consistencia corporal tenían la oportunidad de promover el reinado de lo subjetivo, en donde el tiempo parecía haberse agotado y en donde los usuarios retornaban cronológicamente a etapas infantiles y caían narcotizados por el efecto.
En cada usuario de los chats parece estar escrito y plasmado un código de comportamiento que condensa la esencia de lo que son dichos espacios, ya que llevan a las personas a un inagotable destino: el juego como factor de existencia. De esa manera los chats se vuelven una metáfora sobre la cual caminan las personas con el alma llena de intranquilidad y en donde la inclinación por lo fugaz los lleva a tornarse en unos nómadas.
Pero tal vez la gran enseñanza de los chats desde el punto de vista antropológico y psicológico es que todos los usuarios se tornan por acto de magia en jóvenes, en seres incapaces de percibir el tiempo como algo lineal o que los conduce a ubicarse siempre hacia delante, sino que los orilla a situarse en un estrecho círculo temporal que curiosamente los lleva a paisajes permanentemente cambiantes. Pero la paradoja es que muchos de repente se percatan que esas realidades están sostenidas por ladrillos similares y lo que en un primer momento parecía una "nueva vida" deviene sólo en una simple variación de la anterior.
Publicado en Milenio.

La censura de nuevo

domingo, 6 de abril de 2008


La semana pasada hablamos aquí de las virtudes de la red, de los blogs particularmente, para convertirse en una ventana de expresión sin censuras para una buena cantidad de usuarios. Sin embargo, como para ser desmentidos hace unos días se dio en Europa un acto de censura que refleja que la misma puede ir de la mano de criterios comerciales puestos en marcha por los mismos administradores de la red.
Lo que nos ocupa es el cortometraje Fitna (www.fitnathemovie.com) al que se le impidió operar el sitio con el mismo nombre. Fitna es una producción del líder y diputado del Partido Liberal holandés Geert Wilders, quien plasma en dicho cortometraje su postura crítica sobre el Islam y en particular del Corán. No es nuevo que Wilders asuma una posición dura y sostenida contra el Islam, ya que en diferentes momentos se ha pronunciado por poner un fuerte freno a la inmigración de musulmanes a Holanda por considerar que son un peligro potencial para la sociedad holandesa y Europa en general.
Más allá de que uno esté o no de acuerdo con las polémicas posturas de Wilders, es de destacar que el control de la circulación de contenidos en cualquier sociedad se ve sujeto a diversos y disímbolos intereses. En este caso el impedimento para que el sitio funcionara corrió a cargo de la empresa Network Solutions, que desactivó la página de Wilders, incluso lo hizo antes de que éste pudiera poner el filme en circulación y sin que hasta el momento haya dado un argumento convincente de por qué lo hizo, sólo ha aducido que colocarlo viola las normas de hospedaje establecidos por ellos amén de que les llegaron quejas de personas por el filme.
Esta actitud es una secuela del derrumbe de las Torres Gemelas de 2001, ya que dicha empresa con el fin de evitar cualquier problema terrorista en territorio estadunidense, se pasa por el arco del triunfo la libertad de expresión y decide censurar contenidos cuando considera que pueden molestar al gobierno de su país, pero eso sí pide que en Cuba, por ejemplo, se respete la libertad de expresión.
Aquí el problema es que el pánico al Islam y al terrorismo han afectado a diversos países y las mismas políticas empresariales se modificaron. Sin embargo, eso no ha impedido que otros sitios retomen el filme e incluso que esté doblado al español. Pero en todo caso lo cierto es que el temor a actos terroristas ha llevado a una autocensura. Un ejemplo lo tenemos en Liveleak (liveleak.com), un espacio que nació con la idea de dar cabida a todo tipo de contenidos y que para no meterse en broncas excluyó a Fitna.
La censura del temor se impone y por miedo a ser perseguidos por las hordas de fanáticos y fundamentalistas y diversas empresas de comunicación y entretenimiento no aceptan colocar en sus sitios contenidos que puedan herir los sentimientos de los musulmanes. Lo peor es que los mismos medios emprendan hoy día un feroz ataque contra Wilders por osar externar su opinión sobre el Corán, mientras que por otro lado abogan por la libertad de expresión.
Publicadoa en Milenio

Blogs y libertad de expresión


Justin Hall, precursor y en buena medida propagador de lo que hoy conocemos como blog, dio vida desde la década pasada a un rústico antecedente de los blogs que mató dos pájaros de un tiro: por un lado se convirtió en un contagio colectivo y de entretenimiento activo para millones de personas y por otro abrió camino a un género periodístico. Así que cuando a Jorn Barrer (1997) y Peter Merholz (1999) se les ocurrió acuñar los términos “weblog” y definir la contracción blog, respectivamente, se terminó por aderezar una modalidad de comunicación que hoy es multimedia y genera comunidades apasionadas por un “nuevo” periodismo.
La revolución comunicativa generada por los blogs es desigual entre lenguas, regiones y calidad de contenidos, pero lo que sobresale es su papel de medio de comunicación y la manera en que usuarios de culturas tan dispares se contagian por su uso. Es por ello que existen blogs que concentran un tráfico continuo, otros en cambio no pasan de ser visitados por sus mismos hacedores que encuentran en los mismos un espacio de libertad. Por eso se habla de que dichos medios redefinen la libertad de expresión y son vitales para la democracia.
No se puede negar que gracias a los blogs la libertad de expresión goza de buena salud en la red, y en particular éstos han tenido un papel destacado al permitir difundir información que en tiempos pasados no era factible, sin olvidar que esa ausencia de taxativas abre camino a las difamaciones. Sin embargo, hay una idea que galopa en el ciberespacio como credo: la libertad de expresión debe confluir en movilizaciones sociales.
Incluso en países en donde la libertad de expresión no está garantizada, como Laos o China, por ejemplo, las críticas abiertas a los gobernantes son difíciles de darse, pero gracias al anonimato de la red un sinnúmero de personas tienen la oportunidad de circular sus puntos de vista sin miedo e incluso de difundir la situación prevaleciente en su país, pero no por ello esa “libertad” expresiva desemboca en actos sociales.
Y en tales casos queda demostrado que el objetivo de la libertad de expresión es denunciar situaciones que violentan o erosionan los derechos humanos de determinadas personas, de provocar la reacción de los ciudadanos, de generar una toma de posesión que en algunos casos puede terminar en movilizaciones sociales.
Pero ya el solo hecho que la red permita en teoría que cualquier ser humano pueda recibir y difundir información es un gran avance, el hecho de sortear obstáculos de censura es destacable, como lo atestigua la cubana Yoani Sánchez quien desde su visitado y popular blog (Generación Y: desdecuba.com/generaciony/) ha dado a conocer una situación personal a la cual no es ajena el grueso de cubanos y/o para denunciar ciertas situaciones políticas que se viven al interior de Cuba. A pesar de que el sitio está bloqueado para los cubanos radicados en la isla, se demuestra que con ciertos conocimientos técnicos mínimos se puede luchar por alcanzar la libertad de expresión.


Publicado en Milenio.

La experiencia digital

Internet tiene su primera aparición en el año 1969, al establecerse el primer enlace entre equipos de cómputo que se encontraban en cuartos oscuros de laboratorios de tres universidades diferentes de Estados Unidos (dos de California y una de Utah). A partir de ese experimento fue posible enlazar equipos de computadora y conformar un espacio común de trabajo y pensar que se podría establecer un enlace entre más equipos de cómputo.
Según la Wikipedia internet es “un método de interconexión descentralizada de redes de computadoras implementado en un conjunto de protocolos denominado TCP/IP y garantiza que redes físicas heterogéneas funcionen como una red lógica única, de alcance mundial”.
La definición pone el énfasis en que la red es una cuestión eminentemente técnica, pero internet es más que eso, es un conjunto de procesos sociales, de pautas y relaciones humanas. De hecho ese espacio intangible adquiere sentido en cuanto simbólicamente están presentes diversos seres humanos que se retraducen en un discurso binario en el mismo para llevar a cabo una serie de actividades. La red es, ante todo, un universo de prácticas, de culturas que definen en buena medida los tiempos y humores que conforman a sus usuarios y permiten al mismo tiempo visualizar lo que será el mismo devenir.
Internet ha hecho que el mundo se haya estrechado demasiado, genera la sensación de que es tan fácil de habitar en su dimensión incorpórea, pero sobre todo que da paso a la presunción de que acorta geografías y que al suprimir distancias nulifica lo temporal. Así, al condensar el tiempo o angostarlo, la red termina por generar la sensación de que la existencia está cargada de prisa y que por ese mismo vértigo existencial la experiencia se agota muy rápidamente en cuanto algo tiene olor a rutina, o mejor dicho cualquier cosa de inmediato deviene en acto repetitivo. Testimonia esto la cantidad de sitios que nacen, concentran tráfico y luego en unos cuantos meses parece que tuvieran siglos de existir y se erosionan por falta de interés.
La intensidad y la experiencia que en el pasado se basaba en prácticas que tenían una mayor duración, ahora pierden sentido porque el largo aliento característico de la experiencia en el pasado, vale hoy únicamente si va de la mano de lo volátil. Y hoy día la experiencia tiene sentido en cuanto a lo largo de un determinado espacio de tiempo coinciden muchas prácticas simbólicas.
Publicado en Milenio.

 
Creada por laeulalia basada en la denim de blogger.